Hace doscientos años, Rosa Filipinia Duchesne se embarcó para cruzar el Atlántico y establecer la Sociedad del Sagrado Corazón y educar a los niños del Nuevo Mundo. Al abrir la primera escuela católica al oeste del Misisipi, la Madre Duchesne, conocida como "la mujer que siempre reza", atravesó fronteras para poner fe, amor y educación en el mundo.
Carolyn Osiek, RSCJ, es Profesora Católica emérita de Nuevo Testemento en la Brite Divinity School de Texas Christian University y actualmentete es responsable de loos archivos de la Provincia de Estados Unidos–Canadá de la Sociedad del Sagrado Corazón. En este pequeño libro sobre la vida de Santa Rosa Filipina Duchesne, da vida a la cautivadora historia de la santa que allanó el camino para la educación católica al oeste del Misisipi.
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